miércoles, 30 de enero de 2013

¿Son útiles las vitaminas?


   La palabra VITAMINA es inventada por el bioquímico polaco Casimir Funk en 1912, considerando que se tratan de sustancias indispensables para el desarrollo de la vida (en latín Vita)  y que pensaba contenían en su estructura la función química “amina”; aún cuando en realidad hoy sabemos que si bien su composición es orgánica, su naturaleza y composición es variada.  De hecho las primeras investigaciones que permiten su descubrimiento, entender su funcionalidad en los procesos nutritivos y hasta su síntesis a nivel laboratorio se dan en el período comprendido entre 1930 y 1950.
   En el caso humano está plenamente demostrado que las vitaminas son necesarias para el desarrollo, el crecimiento y el funcionamiento normal del organismo. El cuerpo humano necesita 13 vitaminas básicas: A, C, D, E, K y las varias vitaminas B (tiamina, riboflavina, niacina, acido pantoténico, biotina, B-6, B-12 y acido fólico).  En general las vitaminas provienen de los alimentos que se consumen, aunque el cuerpo puede producir algunas como la D (se forma en la piel con la exposición al sol) y las vitaminas K, B1, B12 y ácido fólico (que se forman en pequeñas cantidades en la flora intestinal); sin embargo, la forma natural  de obtenerlas es mediante una dieta balanceada de alimentos variados.

   Las vitaminas son imprescindibles en los procesos metabólicos que tienen lugar en la nutrición de los seres vivos, no aportan energía puesto que no se utilizan como combustible y por tanto no implican calorías, pero sin ellas el organismo no es capaz de aprovechar los elementos constructivos y energéticos provistos por la alimentación. En este sentido si podemos conocer los nutrientes y su aporte energético, en función del nivel de actividad de la persona, se puede evaluar el nivel vitamínico adecuado en su dieta. Hay inclusive las conocidas como “provitaminas” que son vitaminas “inactivas” hasta que el metabolismo las transforma molecularmente y les otorga actividad vitamínica.




   El requerimiento “diario” de vitaminas que el organismo necesita ha sido determinado científicamente tras años de investigación, y varían según: sexo, edad y nivel de actividad; aunque en general hablamos de dosis muy pequeñas, cuyos valores se expresan generalmente en microgramos o miligramos (µg, mg), aunque también podemos encontrarnos con la medida de unidades internacionales (UI). Están contenidas en grandes cantidades, proporcionalmente al requerimiento diario, en alimentos naturales como las frutas y verduras.  Las vitaminas se clasifican básicamente en función de su capacidad de disolución en grasas o agua como liposolubles  e hidrosolubles respectivamente, y podemos visualizarlas fácilmente en el siguiente esquema:

   Es un  hecho que las vitaminas son necesarias y aportan beneficios al cuerpo y su desarrollo. En el mercado se pueden obtener bien sea vitaminas específicas, como complejos vitamínicos que incluyen de todo un poco, inclusive minerales; pero ¿Qué tan necesario es adquirir estos productos y que tan útil puede ser para nuestro organismo?, ¿pueden dañarnos su carencia o su exceso?

   Hay tres condiciones, en relación a nuestros cuerpos, que pueden presentarse con las vitaminas:
1) Avitaminosis – Cuando hay carencia total de una o varias vitaminas.
2) Hipovitaminosis – Cuando hay carencia parcial de vitaminas.
3) Hipervitaminosis – Cuando existe un exceso que se acumula de una o varias vitaminas, particularmente las poco solubles en agua (Liposolubles) y que por tanto son difíciles de eliminar por la orina.

   Quizás una reflexión en este punto, tiene que ver con que es tan malo en términos generales tanto un exceso como un déficit de vitaminas, pues ambos ocasionan un daño a nuestro organismo. Aunque en términos populares se relaciona a las vitaminas como algo muy bueno y casi mágico en donde pareciera que podemos incorporar MÁS vitaminas a la dieta al ingerirlas en la píldora, por lo que es más fácil e imperceptible caer en el caso de exceso de vitaminas por el consumo innecesario de suplementos vitamínicos

   Por ejemplo, la vitamina A también conocida como retinol, es una de las más esenciales porque interviene en la vista, el crecimiento, la reproducción, el desarrollo del tejido óseo, etc.; se encuentra en la leche, yema de huevo, queso mantequilla e hígado. Su deficiencia puede causar ceguera irreversible y falta de crecimiento, entre otros; pero su EXCESO puede traernos problemas de fatiga, nausea, pérdida de peso, dermatitis, estreñimiento y un anómalo desarrollo de los huesos.

   Otro ejemplo, la vitamina D, es fundamental para una calcificación normal de los huesos; se encuentra en la leche, el huevo, la carne, la mantequilla y el queso. Aquí también los rayos del sol permiten su formación en la piel. Su deficiencia produce raquitismo, pero su exceso provoca: calcificación de los tejidos blandos, inapetencia, nauseas, fatiga, frena el crecimiento y puede ser un enemigo renal y de nuestro sistema cardiovascular.

   Si la vitamina en exceso es de tipo hidrosoluble, por un lado su exceso se desecha por medio de la orina y por otro se requiere de su ingesta diaria, tal es el caso de la vitamina C y todas las del complejo B.  Sin embargo si se trata del tipo liposoluble, éstas no se desechan sino que se almacenan en el tejido graso del cuerpo; lo que por un lado hace que no se requiera ingerirlas todos los días, pero por otro lado por su efecto acumulativo en exceso pueden ser realmente tóxicas.

   No hay ningún estudio serio que demuestre que un deportista aumenta su rendimiento físico al tomar vitaminas, o que un niño acelere su crecimiento si toma más vitaminas de las necesarias. ¿Cuándo entonces ayudan las vitaminas?, desde luego en casos de desnutrición o al seguir ciertas dietas estrictas y limitadas, y NO cuando lo que uno come ya se adapta a nuestras necesidades nutricionales.  Si tenemos la seguridad de que lo que ingerimos no nos aporta las vitaminas necesarias, sin duda es recomendable como un “seguro nutricional” el empleo bien sea de vitaminas específicas o multivitamínicos.

    Hay también otra tendencia en nuestros tiempos en donde por desconocimiento o negocio, se etiqueta como vitaminas a sustancias que NO los son; sea por el caso de que son irrelevantes para el metabolismo o porque podemos sintetizarlas en cantidades suficientes para cubrir nuestras necesidades. Particularmente las tiendas y vendedores de “lo natural” nos quieren hacer creer el poder de sus llamadas vitaminas, lo cual por un lado es fraudulento y por otro hasta peligroso.


   Entre algunos ejemplos de estas supuestas vitaminas, tenemos:
a) Vitamina F – Se trata de dos ácidos grasos (linoleico y linolénico) que no podemos sintetizar, son necesarios para nuestro organismo, pero se encuentran en todas las grasas naturales que ingerimos.
b) Vitamina B17 – Llamada amigdalina, en realidad no tiene ningún papel metabólico en el ser humano y es sumamente tóxica, pues en el estómago desprende cianuro que ha ocasionado varias muertes por su ingestión.
c) Lecitina – Es un fosfolípidos, que es sintetizado por nuestro organismo y por tanto innecesario en la ingesta. En lugar de adelgazar como se dice, es en realidad una grasa que aporta calorías, y por tanto engorda.

   Entonces con base a este panorama, ¿cuál debe ser nuestra postura para con las vitaminas? Sin duda si es un asunto serio por lo menos se debiera consultar a un médico o dietista, para determinar nuestras carencias de vitaminas; y desde luego no auto-recetarnos y menos una MEGA-dosis. Si queremos comprar algún suplemento para uso diario, que efectivamente sea eso y de una marca reconocida, que NO exceda las recomendaciones diarias.

   Los vitamínicos comerciales son útiles para quienes presentan un bajo consumo calórico en sus dietas ( digamos menos de 1,600 calorías por día), también para las mujeres embarazadas o lactantes, los vegetarianos y todos aquellos que tengan condiciones médicas por las que no absorben suficientes nutrientes esenciales. También es cierto que las vitaminas NO son todo en la dieta y que NO son tan eficaces como los alimentos reales, pues no pueden proporcionar por ejemplo fotoquímicos, antioxidantes y fibra.
LA MEJOR VITAMINA , UNA DIETA BALANCEADA

   Si las vitaminas no son lo máximo como suplemento en términos generales, existe mucha menor evidencia que soporte el beneficio de ingerir suplementos minerales. La estrategia más saludable seguirá siendo satisfacer nuestras necesidades nutricionales diarias con un balance de proteínas, vegetales, granos enteros, frutas y productos lácteos bajos en grasa.

   Con todo, las vitaminas en cápsulas o pastillas NO sustituyen a un estilo de vida con una dieta saludable y mucho menos compensan los riesgos asociados con el tabaquismo, la obesidad o la inactividad. Sin embargo, a nivel mundial el segmento de mercado de las vitaminas, apunta a consumidores que invierten la nada despreciable cantidad de 5,000  millones de dólares al año.



REFERENCIAS:

Delgado. (2008). Efectos de un consumo abusivo de vitaminas. Disponible en línea en:

Diario Oficial de la Comunidad Europea (2003, enero 10). Valor del mercado de vitaminas.  Disponible en:

Divins, Maria-Josep. (2004). Vitaminas. Farmacia Profesional, 18, pp. 24-32. Disponible en línea en: http://www.elsevierciencia.com/es/revista/farmacia-profesional-3/articulo/vitaminas-13061378

Licata, Marcela. Vitaminas. Zona Diet. Disponible en línea en:
Excelente sitio interactivo con detalles de consumo vitamínico y de nutrición.

Muñoz, Francisco. (2009). Vitaminas: historia, clasificación, propiedades y alimentos que las contienen. [Sitio Web aula21.net]. Disponible en línea en:

Pintxo. (2012). El exceso de vitaminas también es malo. Disponible en línea en:

Vitaminas: características, fórmula, fuentes y acción fisiológica. Aula Virtual de Biología, España: Universidad de Murcia. Disponible en línea en:
Excelente sitio técnico y de aplicación.

Willett WC, Stampfer MJ. (2001). What vitamins should I be taking, doctor? New England Journal of Medicine, 345 (25), pp.1819-24   Disponible en:

viernes, 4 de enero de 2013

El Tiempo


¿Es el tiempo: lo que marca el reloj, lo que dice el calendario o la percepción de su duración?, ¿Qué cultura tiene la fecha correcta?, ¿Existe el tiempo sin existir cambios?, ¿Se puede viajar en el tiempo en donde el pasado y el futuro sean tan reales como el presente?, ¿Hay tiempo antes del tiempo?, ¿Tiene un sentido absoluto o relativo?, ¿Solo existe en la mente?, ¿Es una propiedad de la naturaleza?, ¿Existe o no existe?, ¿Es una dimensión física lineal circular?.
Ahora sí que he comenzado muy filosófico al respecto, pero con interrogantes válidas para muchos ensayos, en donde la mente humana tiene muchas propuestas pero pocas soluciones y sobre todo mucha imaginación. Todos damos por hecho que existe, pero no hay una manera de definirlo objetivamente.  Ya Aristóteles lo consideraba como una medida de cambio, aunque no el cambio en sí.
Cierto es que el tiempo físico que conocemos es el tiempo que todos conocen como público y universal, relacionado con ciclos de luz y oscuridad que surgen con el movimiento del planeta sobre su eje alrededor del sol. Sin embargo hay eventos que nos parecen eternos siendo cortos, o cortos habiendo sido muy largos; allí entramos a la percepción del tiempo o su aspecto psicológico. Con todo,  lo que hace pensar a los científicos que el tiempo pueda ser algo objetivo, tiene que ver con el orden de los eventos y de las relaciones que se observan en el orden en el Universo.
Muchos hombres han hecho estas preguntas y expuesto muchas teorías desde la remota antigüedad, desde considerar idealistamente al tiempo como subjetivo a la mente humana y una mera construcción intelectual, hasta llegar a considerarlo relativistamente como un marco de referencia (Einstein) real. Lo que no podemos negar es que nos delimita una serie de intervalos detectables en un proceso, en donde si no contamos con la sucesión de eventos en el proceso mismo, entonces podemos decir en este sentido que NO hay tiempo (aunque existiera independiente de una secuencia de eventos); desafortunadamente esta es una definición basada en causas  y no en el tiempo mismo.
Algunos lo ven como algo lineal sin retorno, y otros como en las películas de Hollywood, lo ven circular  y en eterna repetición lo que permite viajar a través de él. Obviamente el único viaje de tiempo que conocemos es el que nos menciona el cine y la televisión en la creatividad de sus escritores. Hay religiones como el Islam y el Cristianismo que ven el tiempo como una sucesión lineal de los hechos, o científicos como Newton que lo ven como una línea contínua desde un principio hasta un final, inclusive la famosa teoría del Big-Bang; este es el concepto más tradicional.
Hay religiones como el hinduismo que ven el tiempo circular y repetible en ciclos, inclusive pensado por algunos científicos como opción de una expansión-contracción contínua del Universo. Inclusive con la llegada de la teoría de la relatividad, y la posible relación entre el espacio y el tiempo, se abre la mente a la posibilidad de elucubrar en el llamado “continuo espacio-tiempo” (idea novedosa de una variable bidimensional), que aunque no tenga la última solución, nos ha puesto a pensar y entender mejor el concepto.
Convencionalmente NADIE duda que el tiempo avance, que usemos días de 24 horas o de que hay que ajustar la hora según el huso horario de la zona del planeta en que nos encontremos. En el occidente decimos estar en el año 2013 en función de la fecha del nacimiento de Jesús, en Oriente los judíos están en el año 5773 a partir de la creación del mundo  y los musulmanes en el año 1434 a partir de la salida de Mahoma a Medina.
No hay científico que crea posible el viaje en el tiempo con base a nuestro conocimiento y tecnologías actuales, y menos pensando en la implicación de que esto pueda cambiar el pasado o el futuro de forma sustancial; ¿has oído de algún viajero real en el tiempo fuera de Hollywood?  Según la teoría de la relatividad mediante la “dilatación del tiempo” es posible viajar al futuro a una velocidad cercana a la luz o utilizando los campos gravitacionales en un corto tiempo, pero al llegar NO hay reversa, pues no es posible retroceder en dichas condiciones.  CLARO que si el universo tiene una distancia a cruzar de digamos 100,000 años luz, nadie en nuestra condición física actual tiene dicho tiempo disponible en su vida.
Si el tiempo fluye realmente (pudiera ser solo un mito genial) y tiene dirección (o varias direcciones)  en nuestras mentes parece objetivamente ir en una única dirección: hacia el futuro. ¿Realmente hay un flujo y dirección?, nada parece indicarlo de forma científica. Claro que es posible que haya leyes y principios que todavía NO conocemos, aunque en la lógica humana solo tenemos evidencias de nuestros hechos pasados y nuestras decisiones actuales solo afectan el futuro; siempre en nuestros procesos mentales las causas preceden a los efectos. Por esto en nuestra mente y nuestra ciencia es imposible pensar que las cosas vayan en sentido invertido, en una vida literalmente en reversa. Aún en Hollywood el pasado es visitado en su orden original y NO en un sentido invertido.
Quizá aquí la pregunta sea, si el pasado o el futuro, son partes de la realidad. Hay teorías que dicen que solo el presente es real; hay otras que dicen que lo acumulado es real (pasado y presente) y algunos otros en función de la teoría de la relatividad, que “depende”. Si nos vamos al terreno de lo popular, todo es simplemente presente; pues nadie cree realmente que vive en el pasado o en el futuro. Claro que por aquí podríamos desviarnos a otro tema: si todo ya está determinado o si el hombre realmente tiene libertad y voluntad en sus hechos, que dejaremos para otra oportunidad.
Es indudable que podemos hablar mucho sobre el tema, y sin embargo seguirlo dejando como un misterio. El tiempo rodea todo lo que percibimos y marca nuestro recorrido en la vida desde que nacemos. Convencionalmente basta con ver el reloj o el calendario, pero, ¿es acaso más que eso?
Saludos, Pedro López




Termodinámica y el ORIGEN


Esta parte de la física se enfoca a estudiar los vínculos existentes entre el calor y las diferentes formas de energía, analizando los efectos de las modificaciones de temperatura, presión, densidad, masa y volumen en cada sistema.
El término energía tiene diversas acepciones y definiciones, relacionadas con la idea de una capacidad para realizar trabajo, transformar, poner en movimiento. Todos los cuerpos, pueden poseer energía debido a su movimiento, a su composición química, a su posición, a su temperatura, a su masa y a algunas otras propiedades.

La energía potencial y la energía cinética son dos elementos a considerar, tanto en la mecánica como en la termodinámica. Estas formas de energía se originan por la posición y el movimiento de un sistema en conjunto, y se conocen como la energía externa del sistema. Sin duda, un tema muy importante en la termodinámica es analizar la energía interior de la materia, energía asociada con el estado interno de un sistema que se llama energía interna. Cuando se especifica un número suficiente de coordenadas termodinámicas, como por ejemplo, temperatura y presión, se determina el estado interno de un sistema y se fija su energía interna.

En general (para un sistema no-relativista), la energía total, ET  , de un sistema puede descomponerse en la energía inherente de la masa EM, la energía cinética EK, la energía potencial EP, y la energía interna U , de la siguiente forma:     
  ET = EM + EK + EP + U


La PRIMERA LEY DE LA TERMODINÁMICA  es simplemente una nueva exposición del principio de de la conservación de la energía: “La energía no se crea ni se destruye solo se transforma”. El cambio de energía tiene que ver con la que ingresa o sale del sistema en cualquier proceso, bien sea reversible (en ambas direcciones) o no (en una sola dirección); o inclusive de tipo cíclico. Pensemos simplemente en un huevo que cae al piso (irreversible tenerlo de vuelta)  o en agua que congelamos en el refrigerador (reversible todas las veces).
OJO, no existe máquina perfecta, pues tendría que estar completamente aislada del sistema para no perder energía. Inclusive el ser humano pierde energía en su entorno constantemente: por que desecha (heces y orina), porque respira, porque mantiene su propia temperatura y metabolismo, porque crece, etc.; lo cual tiene que compensar con la alimentación y con su protección del ambiente.

Comencemos entonces a filosofar, pues para poner orden en el universo o para que una especie “mejore” y sea más compleja, se requiere al menos de que tenga la posibilidad de incorporar más energía que pudiera provenir de su entorno.  Puedes poner un foco prendido a un vaso de agua, pero no surge la vida; puedes poner a vivir unos chimpancés en tu casa, pero nunca se convierten en hombres. ¿Es posible que la vida entonces surja al azar de los mares primitivos y se haga más compleja cada vez? , habría que observar el balance de energía para empezar  y después evaluar la química de posibles procesos, pues NADIE DA LO QUE NO TIENE, ¿verdad?

¿Es posible formar una célula al azar con cualesquier condiciones físicas y químicas actualmente? , NO; si acaso es posible clonar, es decir, sacar células de un ser vivo  y hacer una copia desde su concepción.

La PRIMERA LEY DE LA TERMODINAMICA nos dice que no es posible crear energía  y que en algún momento todo se detendrá porque se acabará la energía disponible, para llegar a un equilibrio final. Entonces, ¿todo comenzó siendo más energía y menos materia?, ¿todo comenzó con un balance de materia y energía?, ¿Qué explotó para originar todo a partir de la nada?   Parece que NO está surgiendo materia y energía todos los días, ¿puede venir todo de una explosión de partículas (Big-Bang)? o será  simplemente que ¿todo viene de un estado más perfecto y se está degradando?

Pues bien, pensemos ahora en la SEGUNDA LEY DE LA TERMODINÁMICA, que nos indica que “la cantidad de entropía del universo tiende a incrementarse con el tiempo”. Por un lado se observa el orden en que se llevan los procesos termodinámicos y por otro el costo energético que conlleva el orden en la vida y el universo.  La definición más elemental de este concepto de entropía, es el grado de desorden que tiene un sistema; e irónicamente es una forma de medición, que alcanza su máximo valor cuando el sistema se acerca al equilibrio (cero intercambios, cero movimientos). INCLUSIVE los científicos creen firmemente que cuando la entropía sea máxima en el Universo, cuando haya un equilibrio, llegará la MUERTE térmica del universo.
Es claro que todo tiende al caos a medida que transcurre el tiempo, especialmente en un sistema cerrado (donde no entra energía adicional que mantenga el orden). Una casa sin mantenimiento se auto-destruye con el tiempo, un auto se oxida, un foco se quema, los alimentos se descomponen, etc.  POR TANTO el orden NO PUEDE aumentar, a menos que tome energía del entorno que se desordene aún más.

Sin EMBARGO, la vida misma es un ejemplo de orden, mientras hay vida; pues después la muerte lleva todo a esa “máxima entropía” que es la tendencia universal hacia el desorden y el caos.  ¿Porqué la vida es lo único que va en contra de esta SEGUNDA LEY?, ¿Podrá el hombre algún día buscar una vida física eterna que se contradice con las actuales leyes de la termodinámica?


Nosotros mismos, sin alimentos y el abrigo del ambiente, simplemente morimos  y NO seguimos vivos por “absorber energía del universo”; pareciera con estas leyes que ha descubierto el hombre en el comportamiento de la naturaleza que detrás de todo hay un diseño inteligente que no permite que se genere una colisión atómica al azar  y que tampoco se genere la vida al azar, ¿no crees?

Según la FÍSICA es imposible que todo surja de la nada, y también es imposible que la vida se ordene al azar; ¿Qué otras explicaciones puede haber para el universo  y la vida que soporten su origen sin incongruencias? Nuestro conocimiento actual es limitado, aunque sin duda veremos muchas más teorías al respecto que brinden mejores aproximaciones en el futuro, particularmente en el campo experimental de la teoría de la relatividad y sus implicaciones en el comportamiento del espacio-tiempo  y las interacciones que propone en cuanto a la materia y la energía.




La existencia misma del Universo, y su balance energético, sigue siendo desconcertante y sin solución desde el punto de vista de la actual física teórica; en donde las mejores teorías no ofrecen una explicación sustentada y congruente. Sin embargo es cierto que mientras más analizamos al Universo y a la vida, vemos que no funcionan al azar  y que existen muchos principios y leyes inmersos en su funcionamiento, mostrando sin duda un orden.

¿Es posible que hayas principios que unifiquen estas leyes que aún desconocemos?, ¿Es posible que haya leyes mayores que aún no hemos descubierto? , ¿Es posible que detrás de todo esté un supremo arquitecto?

Y sin embargo, el orden de la vida y el universo, siguen irónicamente su camino en contra de todas las previsiones científicas actuales.

Saludos , Pedro López

jueves, 3 de enero de 2013

Cadena de Valor y Ventaja Competitiva


Michael Porter propuso la cadena de valor como una herramienta de la que dispone una empresa para identificar formas de generar mas valor para el consumidor. Toda la empresa consiste en un conjunto de actividades que se llevan a cabo para diseñar, fabricar, comercializar y brindar apoyo a sus productos. La cadena de valor identifica nueve actividades relevantes en términos de estrategia que generan valor y costo en un negocio específico, estas comprenden cinco actividades primarias y cuatro actividades de apoyo.
Las actividades primarias representan la secuencia de llevar materiales a la empresa, operar con base en esos materiales, comercializarlos y darles servicio. Las actividades de apoyo tienen lugar al mismo tiempo que se desarrollan estas actividades primarias.
La función de la empresa es analizar los costos y desempeños en cada una de las actividades que generan valor y buscar la mejor forma de mejorarlos.

1.1  Cadena de valor y ventaja competitiva
La ventaja competitiva no puede ser comprendida viendo a una empresa como un todo, porque  radica en las muchas actividades discretas que desempeña una empresa en el diseño, producción, mercadotecnia, entrega y apoyo de sus productos. Cada una de estas actividades puede contribuir a la posición de costo relativo de las empresas y crear una base para la diferenciación.
Es necesario contar con una forma sistemática de examinar todas las actividades que una empresa desempeña y como interactúan, para evaluar las fuentes de la ventaja competitiva. En este sentido,  la cadena de valor es una herramienta básica para hacerlo. La cadena de valor disgrega a la empresa en sus actividades estratégicas relevantes para comprender el comportamiento de los costos y las fuentes de diferenciación existente y potencial. Una empresa obtiene la ventaja competitiva, desempeñando estas actividades estratégicamente importantes a menor costo, o mejor que sus competidores.

Las cadenas de valor de las empresas en un sector industrial difieren, reflejando sus historias, estrategias, y éxitos en implementación. Una diferencia importante es que la cadena de valor de una empresa puede diferir en el panorama competitivo del de sus competidores, representando una fuente potencial de ventaja competitiva. El servir solo a un segmento particular en el sector industrial puede permitir que una empresa ajuste su cadena de valores a ese segmento y tenga como resultado costos más bajos o diferenciación para servir a ese segmento en comparación con sus competidores. El ampliar o estrechar los mercados geográficos servidos también puede afectar la ventaja competitiva. El grado de integración dentro de las actividades juega un papel clave en la ventaja competitiva.    

Cada cadena de valor de una empresa esta compuesta de nueve categorías de actividades genéricas que están eslabonadas en formas características. La cadena genérica se usa para demostrar como una cadena de valor puede ser construida para una empresa especial, reflejando las actividades específicas que desempeña. Las  actividades en la cadena de valor de una empresa están eslabonadas unas a otras y a las actividades de sus proveedores, canales y compradores, y estas uniones afectan la ventaja competitiva.

1.2 La cadena de valor
Lo importante para la construcción de una cadena de valor son las actividades de una empresa para un sector industrial particular (la unidad de negocio). 
Aunque las empresas en el mismo sector industrial pueden tener cadenas de valor similares a las cadenas de sus competidores, difieren con frecuencia; y estas diferencias entre las cadenas de valor de los competidores son una fuente clave de la ventaja competitiva. La cadena de valor de una empresa en un sector industrial puede variar algo para artículos diferentes en su línea de productos, o compradores diferentes, áreas geográficas, o canales de distribución.

    En términos competitivos, el valor es la cantidad que los compradores están dispuestos a pagar por lo que una empresa les proporciona. El valor se mide por el ingreso total, es un reflejo del alcance del producto en cuanto al precio y de las unidades que puede vender. Una empresa es lucrativa si el valor que impone excede a los costos implicados en crear el producto. El crear el valor para los compradores que exceda el costo de hacerlo es la meta de cualquier estrategia genérica.   La cadena de valor despliega el valor total, y consiste de las actividades de valor y del margen. Las actividades de valor son las actividades distintas física y tecnológicamente que desempeña una empresa. Estos son los componentes por medio de los cuales una empresa crea un producto valioso para sus compradores. El margen es la diferencia entre el valor total y el costo colectivo de desempeñar las actividades de valor.

Cada actividad de valor emplea insumos comprados, recursos humanos (mano de obra y administración), y algún tipo de tecnología para desempeñar su función. Cada actividad de valor también crea y usa la información, como los datos del comprador (orden de entrada), parámetros de desempeño (pruebas), y estadísticas de fallas del producto. Las actividades de valor también pueden crear activos financieros como inventario y cuentas por cobrar, o compromisos como cuentas por pagar. 

Las NUEVE actividades de valor pueden dividirse en dos amplios tipos: actividades primarias y actividades de apoyo/soporte, como podemos observar en el diagrama:


Las actividades primarias, son las actividades implicadas en la creación física del producto y su venta y transferencia al comprador, así como asistencia posterior a la venta. En cualquier empresa, las actividades primarias pueden dividirse en las cinco categorías genéricas mostradas en la imagen. Las actividades de apoyo sustentan a las actividades primarias y se apoyan entre sí, proporcionando insumos comprados, tecnología, recursos humanos y varias funciones de toda la empresa. La infraestructura de la empresa no esta asociada con actividades primarias particulares, sino que apoya a la cadena entera.

Por tanto, las actividades de valor son los componentes discretos de la ventaja competitiva. Como cada actividad es desempeñada en combinación con su economía determinará si una empresa tiene un costo alto o bajo en relación con sus competidores. Como se desempeña cada actividad de valor también determinara su contribución a las necesidades del comprador y por lo mismo a la diferenciación. El comparar las cadenas de valor de los competidores expone diferencias que determinan la ventaja competitiva.

1.3 Actividades de valor primarias
Hay cinco categorías genéricas de actividades primarias relacionadas con la competencia en cualquier industria, en el esquema mostrado. Cada categoría es divisible en varias actividades distintas que dependen del sector industrial en particular y de la estrategia de la empresa.
a)    Logística Interna -  Las actividades asociadas con recibo, almacenamiento y manejo de insumos del producto, como: almacenamiento, control de inventarios, programación de vehículos y retorno a los proveedores.
b)    Operaciones - Actividades asociadas con la transformación de insumos en la forma final del producto, como: maquinado, empaque, ensamble, mantenimiento del equipo, pruebas, impresión u operaciones de instalación.
c)    Logística Externa - Actividades asociadas con la recopilación, almacenamiento y distribución física del producto a los compradores, como almacenes de materias terminadas, manejo de materiales, operación de vehículos de entrega, procesamiento de pedidos y programación.
d)    Mercadotecnia y Ventas - Actividades asociadas con proporcionar un medio por el cual los compradores puedan comprar el producto e inducirlos a hacerlo, como publicidad, promoción, fuerza de ventas, cuotas, selecciones del canal, relaciones del canal y precio.
e)    Servicio - Actividades asociadas con la prestación de servicios para realzar o mantener el valor del producto, como la instalación, reparación, entrenamiento, repuestos y ajuste del producto.
Cada una de las categorías puede ser vital para la ventaja competitiva, dependiendo del sector industrial. Sin embargo, en cualquier empresa todas las categorías de las actividades primarias estarán presentes hasta cierto grado y jugarán algún papel en la ventaja competitiva.

1.4 Actividades de valor de apoyo
Las actividades de valor de apoyo implicadas en la competencia en cualquier sector industrial pueden dividirse en cuatro categorías genéricas:
a)    Abastecimiento o Adquisiciones -  Se refiere a la función de comprar insumos que serán usados en la cadena de valor de la empresa. Los insumos comprados incluyen materias primas, provisiones y otros artículos de consumo, así como los activos como maquinaria, equipo de laboratorio, equipo de oficina y edificios. Aunque los insumos comprados se asocian comúnmente con las actividades primarias, están presentes en cada actividad de valor, incluyendo las actividades de apoyo.
    Algunos artículos, como la materia prima, se compran por el tradicional departamento de compras, mientras que otros artículos son comprados por los gerentes de planta (ej. máquinas). gerentes de oficina (ej. ayuda temporal), vendedores (ej. comidas y alojamiento) y aun por el jefe ejecutivo (ej. consultoría estratégica).
    El costo de las actividades de abastecimiento por sí mismas representan con frecuencia una porción pequeña, si no insignificante, de los costos totales, pero con frecuencia tienen un gran impacto en el costo general de la empresa y en la diferenciación. Las prácticas de compra mejoradas pueden afectar fuertemente el costo y la calidad de los insumos comprados, así como a otras actividades asociadas con el recibo y uso de los insumos, y a la interacción con proveedores.
b)    Desarrollo de Tecnología - Cada actividad de valor representa tecnología, sea conocimientos (know-how), procedimientos, o la tecnología dentro del equipo de proceso. El conjunto de tecnologías empleadas por la mayoría de las empresas es muy amplio, yendo desde el uso de aquellas tecnologías para preparar documentos y transportar bienes a aquellas tecnologías representadas en el producto mismo.
     El desarrollo de la tecnología consiste en un rango de actividades que pueden ser agrupadas de manera general en esfuerzos por mejorar el producto y el proceso. El desarrollo de tecnología puede apoyar a muchas de las diferentes tecnologías encontradas en las actividades de valor, incluyendo áreas como tecnología de telecomunicaciones para el sistema de entrada de pedidos, o la automatización de la oficina para el departamento de contabilidad. No solamente se aplica a las tecnologías directamente unidas al producto final. El desarrollo de tecnología también toma muchas formas, desde la investigación básica y diseño del producto hasta la investigación media, diseño de equipo de proceso y procedimientos de servicio. El desarrollo de tecnología que está  relacionado al producto y sus características apoya a la cadena entera, mientras que otros desarrollos en tecnología se asocian con actividades particulares de apoyo o primarias.
c)     Administración o gestión de recursos humanos - Consiste de las actividades implicadas en la búsqueda, contratación, entrenamiento, desarrollo y compensaciones de todos los tipos del personal. Respalda tanto a las actividades primarias como a las de apoyo y a la cadena de valor completa.
    La administración de recursos humanos afecta la ventaja competitiva en cualquier empresa, a través de su papel en determinar las habilidades y motivación de los empleados y el costo de contratar y entrenar. En algunos sectores industriales sostiene la clave de la ventaja competitiva.
d)    Infraestructura de la Empresa - Consiste de varias actividades, incluyendo la administración general, planificación, finanzas, contabilidad, asuntos legales gubernamentales y administración de calidad. La infraestructura, a diferencia de las otras actividades de apoyo, apoya normalmente a la cadena completa y no a actividades individuales. Dependiendo de si la empresa está diversificada o no, la infraestructura de la empresa puede ser autocontenida, o estar dividida entre una unidad de negocios y la corporación matriz. En las empresas diversificadas, las actividades de infraestructura se dividen clásicamente entre la unidad de negocio y los niveles de corporación (ejemplo, el financiamiento se hace con frecuencia a un nivel de corporación, mientras que la administración de calidad se hace al nivel de unidad de negocio). Muchas actividades de infraestructura ocurren, sin embargo, tanto en el nivel de unidad de negocio como corporación.

1.5 Eslabones dentro de la cadena de valor
Todo lo que hace una empresa debe quedar capturado dentro de una actividad primaria o de apoyo. Las etiquetas de actividad de valor son arbitrarias y deben ser elegidas de forma que proporcionen la mejor perspectiva del negocio. El ordenamiento de las actividades debe seguir ampliamente el flujo del proceso, pero este orden también depende del juicio.
    Aunque las actividades de valor son los componentes de la ventaja competitiva, la cadena de valor no es una colección de actividades independientes, sino un sistema de actividades interdependientes. Las actividades de valor están relacionadas por eslabones dentro de la cadena de valor. Los eslabones son las relaciones entre la manera en que se desempeñe una actividad y el costo o desempeño de otra.

Los eslabones pueden llevar a la ventaja competitiva de dos maneras: optimización y coordinación. Los eslabones con frecuencia reflejan los intercambios entre las actividades para lograr el mismo resultado general.
Los eslabones son numerosos, y algunos son comunes para muchas empresas. Los eslabones más obvios son aquellos entre las actividades de apoyo y las actividades primarias. Los eslabones entre las actividades de valor surgen de varias causas genéricas, entre ellas las siguientes: la misma función puede ser desempeñada de diferentes formas, el costo o desempeño de las actividades directas se mejora por mayores esfuerzos en las actividades indirectas, las actividades desempeñadas dentro de una empresa reducen la necesidad de mostrar, explicar o dar servicio a un producto en el campo y las funciones de aseguramiento de calidad pueden ser desempeñadas de diferentes maneras.

1.6  Panorama competitivo y la cadena de valor.
El panorama competitivo puede tener un poderoso efecto en la ventaja competitiva, porque conforma la configuración y economía de la cadena de valor. Hay cuatro dimensiones del panorama que afectan la cadena de valor:
a)      Panorama del segmento - Las diferencias en las necesidades o las cadenas de valor requeridas para servir a diferentes segmentos de producto o comprador pueden llevar a una ventaja competitiva de enfoque.
b)       Grado de integración - Define la división de las actividades entre una empresa y sus proveedores, canales y compradores. Una empresa puede comprar componentes en lugar de fabricarlos, por ejemplo, o contratar un servicio en lugar de mantener una organización de servicio. Similarmente, los canales pueden desempeñar muchas funciones de distribución, servicio y mercadotecnia en lugar de la empresa. Una empresa y sus compradores también pueden dividir las actividades de formas diversas.
    Las oportunidades de integración son más ricas de lo que se reconoce con frecuencia. La integración vertical tiende a ser considerada en términos de productos físicos y reemplazando a las relaciones de proveedores completas en lugar de en términos de actividades, pero puede abarcar ambos. Si la integración o no integración (desintegración) baja los costos o aumenta la diferenciación, depende de la empresa y de la actividad implicada. La cadena de valor permite que una empresa identifique más claramente los beneficios potenciales de la integración.
c)       Panorama geográfico - Puede permitir que una empresa comparta o coordine las actividades de valor para servir a diferentes áreas geográficas. Las interrelaciones geográficas pueden aumentar la ventaja competitiva si el compartir o coordinar las actividades de valor baja los precios o aumenta la diferenciación; sin embargo, puede haber costos de coordinación tanto como diferencias entre regiones o países que reducen la ventaja de compartir.
d)      Panorama industrial - Las interrelaciones entre las unidades de negocios son similares en concepto a las interrelaciones geográficas entre las cadenas de valor. Las interrelaciones entre las unidades de negocios pueden tener una poderosa influencia en la ventaja competitiva, ya sea bajando el costo o aumentando la diferenciación. Un sistema de logística compartido puede permitir que una empresa coseche economías de escala, por ejemplo, mientras que una fuerza de ventas compartida que ofrece productos relacionados puede mejorar la efectividad del agente con el comprador y, por tanto, aumentar la diferenciación.
   No todas las interrelaciones llevan a la ventaja competitiva y no todas las actividades se benefician compartiendo; pues siempre hay costos al compartir las actividades que deben ser superados por los beneficios, debido a que las necesidades de diferentes unidades de negocio pueden no ser las mismas con respecto a la actividad de valor.

Una empresa puede ser capaz de dibujar fronteras de unidad más a tono con sus fuentes de ventaja competitiva y proporcionar los tipos apropiados de coordinación, dependiendo de su estructura organizacional a la cadena de valor y los eslabones dentro de ella y con los proveedores o canales. Es indudable que una estructura organizacional que corresponda a la cadena de valor, mejorará la capacidad de una empresa para crear y mantener la ventaja competitiva.



El modelo de la Cadena de valor de Porter, como hemos podido observar,  permite examinar de forma sistemática todas las actividades de una empresa y sus interacciones, para identificar las fuentes específicas de ventaja competitiva. Permite comprender el comportamiento en costos de las actividades estratégicas  y localizar las fuentes de diferenciación existentes y potenciales. 

De acuerdo a este modelo, desarrolla esquemáticamente la cadena de valor para la empresa donde colaboras, identificando las actividades que realmente generan el valor.


BIBLIOGRAFÍA:
Hitt, Michael A., et al. (2004). “Análisis de la cadena de valor” en Administración Estratégica. México: Thompson, pp. 89-92.

Las 5 fuerzas de Porter


El modelo de las cinco fuerzas de Porter es una herramienta de gestión que permite realizar un análisis del entorno específico externo de una empresa, a través del análisis estructural de la industria o sector a la que pertenece.
   Uno de los postulados de este modelo, es que en el entorno de la organización existen cinco fuerzas que determinan la rentabilidad a largo plazo de algún mercado o segmento del mismo.  El clasificar estas fuerzas de esta forma permite lograr un mejor análisis del entorno de la empresa o de la industria a la que pertenece y, de este modo poder diseñar estrategias que permitan aprovechar las oportunidades y hacer frente a las amenazas.

Estas fuerzas son las siguientes:

1. Amenaza de la entrada de nuevos competidores

Hace referencia a la entrada potencial de empresas que vendan el mismo tipo de producto.   Al intentar entrar una nueva empresa a una industria, ésta podría tener barreras de entradas tales como la falta de experiencia, lealtad del cliente, cuantioso capital requerido, falta de canales de distribución, falta de acceso a insumos, saturación del mercado, etc. Pero también podrían fácilmente ingresar si es que cuenta con productos de calidad superior a los existentes, o precios más bajos.
Algunos factores que definen ésta fuerza son:
  • Existencia de barreras de entrada.
  • Economías de escala.
  • Diferencias de producto en propiedad.
  • Valor de la marca.
  • Costos de cambio.
  • Requerimientos de capital.
  • Acceso a la distribución.
  • Ventajas absolutas en costo.
  • Ventajas en la curva de aprendizaje.
  • Represalias esperadas.
  • Acceso a canales de distribución.
  • Mejoras en la tecnología
     El análisis de la amenaza de la entrada de nuevos competidores nos permite establecer barreras de entrada que impidan el ingreso de estos competidores, tales como la búsqueda de economías de escala o la obtención de tecnologías y conocimientos especializados; o en todo caso, nos permite diseñar estrategias que hagan frente a las de dichos competidores.

2. Amenaza del ingreso de productos sustitutos

Hace referencia a la entrada potencial de empresas que vendan productos sustitutos o alternativos a los de la industria.  La entrada de productos sustitutos pone un tope al precio que se puede cobrar antes de que los consumidores opten por un producto sustituto.   Podemos citar entre otros, los siguientes factores:
  • Propensión del comprador a sustituir.
  • Precios relativos de los productos sustitutos.
  • Costo o facilidad de cambio del comprador.
  • Nivel percibido de diferenciación de producto.
  • Disponibilidad de sustitutos cercanos.
   El análisis de la amenaza del ingreso de productos sustitutos nos permite diseñar estrategias destinadas a impedir la penetración de las empresas que vendan estos productos, o en todo caso, estrategias que nos permitan competir con ellas.

3. Poder de negociación de los proveedores

Hace referencia a la capacidad de negociación con que cuentan los proveedores, por ejemplo, mientras menor cantidad de proveedores existan, mayor será su capacidad de negociación, ya que al no haber tanta oferta de insumos, éstos pueden fácilmente aumentar sus precios.   Además de la cantidad de proveedores que existan, el poder de negociación de los proveedores también podría depender del volumen de compra, la cantidad de materias primas sustitutas que existan, el costo que implica cambiar de materias primas, etc.
Algunos factores asociados a esta fuerza son:
  • Facilidades o costos para el cambio de proveedor.
  • Grado de diferenciación de los productos del proveedor.
  • Presencia de productos sustitutivos.
  • Concentración de los proveedores.
  • Solidaridad de los empleados (ejemplo: sindicatos).
  • Amenaza de integración vertical hacia adelante de los proveedores.
  • Amenaza de integración vertical hacia atrás de los competidores.
  • Costo de los productos del proveedor en relación con el costo del producto final.
    El análisis del poder de negociación de los proveedores, nos permite diseñar estrategias destinadas a lograr mejores acuerdos con nuestros proveedores o, en todo caso, estrategias que nos permitan adquirirlos o tener un mayor control sobre ellos.

4. Poder de negociación de los compradores

Hace referencia a la capacidad de negociación con que cuentan los consumidores o compradores, por ejemplo, mientras menor cantidad de compradores existan, mayor será su capacidad de negociación, ya que al no haber tanta demanda de productos, éstos pueden reclamar por precios más bajos.   Además de la cantidad de compradores que existan, el poder de negociación de los compradores también podría depender del volumen de compra, la escasez del producto, la especialización del producto, etc.   Cualquier que sea la industria, lo usual actualmente es que los compradores siempre tengan un mayor poder de negociación frente a los vendedores.
Algunos factores asociados a esta fuerza son:
  • Concentración de compradores respecto a la concentración de compañías.
  • Grado de dependencia de los canales de distribución.
  • Posibilidad de negociación, especialmente en industrias con muchos costos fijos.
  • Volumen comprador.
  • Costos o facilidades del cliente de cambiar de empresa.
  • Disponibilidad de información para el comprador.
  • Capacidad de integrarse hacia atrás.
  • Existencia de sustitutivos.
  • Sensibilidad del comprador al precio.
  • Ventaja diferencial (exclusividad) del producto.
  • Análisis RFM del cliente (Compra Recientemente, Frecuentemente, Margen de Ingresos que deja).
   El análisis del poder de negociación de los consumidores o compradores, nos permite diseñar estrategias destinadas a captar un mayor número de clientes u obtener una mayor fidelidad o lealtad de éstos, por ejemplo, estrategias tales como aumentar la publicidad u ofrecer mayores servicios o garantías.

5. Rivalidad entre competidores

   Hace referencia a las empresas que compiten directamente en una misma industria, ofreciendo el mismo tipo de producto.  El grado de rivalidad entre los competidores aumentará a medida que se eleve la cantidad de éstos, se vayan igualando en tamaño y capacidad, disminuya la demanda de productos, se reduzcan los precios, etc. La rivalidad entre los competidores define la rentabilidad de un sector: cuanto menos competido se encuentre un sector, normalmente será más rentable y viceversa.
     El análisis de la rivalidad entre competidores nos permite comparar nuestras estrategias o ventajas competitivas con las de otras empresas rivales y, de ese modo saber, por ejemplo, si debemos mejorar o rediseñar nuestras estrategias.


¿Qué te parece si ahora haces un ejercicio aplicando estos principios a la situación actual de tu empresa para identificar oportunidades y amenazas que ofrece el actual entorno?



BIBLIOGRAFÍA:
  • Steiner, George. (2002). “El análisis de la situación” en Planeación Estratégica. Lo que todo director debe saber. México: CECSA. pp. 123-147.

  • Hitt, Michael A., et al. (2004). “Estrategia de negocios” en Administración Estratégica. México: Thomson. pp. 104-133.